ORIGEN E IMPORTANCIA DE LA MEMORIA


Ya conocemos la gran diferencia que existe entre ver y percibir; ahora debemos decir algo relativo a la memoria, sin la cual no puede haber verdadera percepción. La grandísima importancia de la memoria estriba precisamente en que hace posible la percepción aun de las cosas más elevadas. Sin la memoria no podríamos reconocer, ni aprender, ni saber. Estamos tan acostumbrados a usar la facultad de la memoria, que no podemos imaginar lo que seríamos si careciésemos de ella. De lejos vemos algo que viene a lo largo de un camino, y al cabo de un rato, percibimos que es un ser humano; después, por los vestidos, podemos decir que es un hombre y no una mujer; pero sin afirmar quién es. Por último, descubrimos que es una persona conocida. En este ejemplo vemos que la memoria obra en las clases más sencillas de percepción, y que merece que dediquemos cierto espacio a su estudio para tratar de aclarar el origen de algunos fenómenos curiosos.