Por qué se oyen y se ven a veces cosas que no existen


A veces las cosas van de mal en peor y empiezan a verse y oírse fuera de los sueños, en estado de vigilia, cosas que no existen. Todos debieran saber algo acerca de esta materia, porque éste, como la mayor parte de los males de este mundo, es de remedio, hasta cierto punto fácil, en sus comienzos; pero muy difícil de curar en cuanto ha adquirido cierto arraigo. Hemos de tener presente que en los humanos la vista y el oído han alcanzado notable desarrollo, son los más importantes y los más usados y, por consiguiente, los más delicados de todos los órganos de los sentidos. Así pues, debemos prestar grande atención en cuanto empieza a perturbarse su funcionamiento. Esta perturbación no es culpa, por regla general, de tales órganos, sino de nosotros mismos. Un poco de cuidado, sentido común y reposo bastan al principio para restablecer la normalidad.

Ahora bien, habiendo visto los medios que ha de atravesar la luz a su paso hasta la retina, hemos de examinar ahora la diferente acción de cada uno de estos diversos materiales sobre el agente que los atraviesa.

Si consideramos la marcha de la luz en el ojo normal, en el miope y en el de larga vista, comprenderemos cómo las lentes modifican la refracción de la luz, al pasar ésta por los cuatro materiales que encuentra desde el exterior hasta la retina.