Locomotoras de vapor, eléctricas y eléctrico-diesel


Tres son los tipos de locomotoras: de vapor, eléctrica y eléctrico-diesel.

El primer tipo es el más común, y se utiliza para transportar cargas a grandes distancias. Las eléctricas tienen mayor empleo en las ciudades y zonas suburbanas, donde el humo se torna insoportable. Las nombradas en último término, que son las de tipo más moderno, están siendo cada día más utilizadas por las ventajas que presentan.

Las máquinas de vapor son las más antiguas locomotoras que se conocen. Entre las láminas que ilustran este artículo hay una en la que puede verse cómo es una locomotora de vapor, las partes que la forman y de qué manera funciona.

Poderosas máquinas de este tipo arrastran convoyes de 15 a 20 vagones de pasajeros y toneladas de carga a grandes distancias y con apreciable rapidez. Las locomotoras dedicadas exclusivamente a la tracción de cargas deben ser construidas teniendo más en cuenta la fuerza y la resistencia que la velocidad. Por eso, en ellas las calderas son mayores y las ruedas motrices más pequeñas.

La locomotora eléctrica rivaliza con el tipo anterior y hasta lo supera en lo tocante a velocidad. Sus características principales son: rápido funcionamiento, higiene y comodidad. Muy diferentes de sus hermanas de vapor, llevan en su interior uno o dos motores que se ponen en contacto con los ejes de las ruedas por medio de un sistema de transmisión. Muchas locomotoras eléctricas pueden arrastrar convoyes de hasta cinco mil toneladas de carga o veinte vagones de pasajeros a una velocidad de más de 160 kilómetros por hora.

Las locomotoras eléctrico-diesel generan la electricidad por medio de un motor especial de combustión interna. Datan del año 1941, y fueron utilizadas por primera vez en trenes de pasajeros.

Los tanques cargan casi 20.000 litros de combustible y la locomotora puede andar 300 km sin reabastecer-se. Estas máquinas son más caras que las de los otros tipos, pero, en compensación, su funcionamiento es más económico porque utilizan combustible más barato. Tienen también una característica interesante: arrancan y se detienen con gran facilidad.