La belladona, planta de la que debemos alejarnos


Otra planta venenosa aunque también medicinal, es la belladona; debemos todos saber que es peligroso comer la baya negra-violácea del tamaño de una cereza pequeña que constituye su fruto. Esta planta es herbácea, las hojas son aovadas o elípticas, y alcanza una altura de hasta dos metros. Las flores, inclinadas hacia el suelo, tienen forma acampanada, color rojo-violáceo, y aparecen dispuestas en pedúnculos laterales, solitarios o apareados. Toda la planta es venenosa, y aun la pequeña gota que salta al arrancar una de sus hojas o gajos, puede producir serias molestias a nuestros ojos; así que, por lo tanto, debemos abstenernos de tocarla. Se emplea contra los espasmos, cólicos y bronquitis.

La atropina, que se obtiene de la belladona, es usada por los oculistas para dilatar la pupila del ojo y examinarla más cómoda y rápidamente. Este producto debe ser usado únicamente por prescripción del oculista o el médico.