El tritón pone sus huevos en los estanques y los resguarda de los peces


El tritón pone sus huevos uno por uno en las hojas de las plantas que crecen en el agua.

Cuando la hembra pone el huevo dobla la hoja, y la cierra con una solución pegajosa, dejando de tal suerte la puerta asegurada.

Al cabo de catorce días, se abren los huevos y salen los hijuelos del tritón. Se parecen a pececillos diminutos, pues tienen igual el cuerpo y carecen de patas. Presentan branquias junto a la garganta, con las cuales respiran el aire del agua. Al cabo de una quincena comienzan a aparecer las patas delanteras, y a las tres semanas salen las traseras. A medida que las branquias disminuyen de volumen, los pulmones se desarrollan y el tritón respira el aire de la atmósfera. Hasta entonces este anfibio se ha alimentado sólo de vegetales; pero a partir de aquel momento comienza a comer insectos. En el término de seis semanas desaparecen las branquias, se forman las patas y el reptil deja por primera vez el estanque y va en busca de gusanos y caracoles.