Los dramaturgos alemanes, discípulos de Federico Hebbel


Nadie puede negar que el fundador del drama realista moderno es Hebbel, no solo por la hermosa trilogía Los Nibelungos, sino también por Judith, Genoveva, María Magdalena, Gyges y su anillo.

De él parten las líneas del actual teatro alemán, que con Georg Kaiser intentó suplantar el conflicto de caracteres por el drama intelectual. Sus obras: Gas, I y II, El incendio de la Ópera muestran la violación del alma por la civilización materialista moderna. Otro dramaturgo es Ernst Toller cuya innegable tendencia social se advierte en los títulos de sus producciones más conocidas: Masa humana y El destructor de máquinas. Pero la representación más cabal de la actual dramaturgia germana se halla sin duda en Bertold Brecht, poeta lírico de tendencia expresionista. Su teatro es la réplica de los sucesos políticos contemporáneos y posteriores a la segunda guerra mundial: Tambores en la noche, Maleza cerrada, La ópera de tres centavos, y Madre coraje.