Honorato de Balzac, su comedia humana y la novela moderna


En su juventud, para ganarse la vida, Balzac fue pasante de escribano. Obsesionado por la idea de enriquecerse, abandonó su ocupación y se hizo editor, impresor y fundidor, todo en uno, pero fracasado en su empeño, contrajo deudas cuantiosas, de las que no se vio libre en toda su vida, a pesar de su extraordinaria fecundidad y aunque trabajó como un esclavo de la pluma. Los libros que le dieron fama como novelista de primer orden fueron: La piel de zapa, Eugenia Grandet, El padre Goriot. Tuvo la idea de unir por lazos de parentesco a los múltiples personajes de sus novelas de costumbres. Genéricamente llamó Comedia Humana a la serie de sus novelas, en las cuales creó caracteres y tipos que no morirán: Rastignac, Grandet, Gobseck, Goriot, pues parece que los hubiera tomado de la vida misma. Toda la sociedad de Francia del siglo xix quedó para siempre palpitando en sus novelas, como dos siglos antes Moliere lo había hecho en el teatro. Balzac vivió 51 años, desde su nacimiento en Tours el año 1799, hasta su muerte en 1850.