La república de Guinea, tierra de los fullah y de los malinké


Guinea surgió a la vida soberana el 2 de octubre de 1958; antes había pertenecido al territorio del África Occidental Francesa. Es un país de 245.857 km cuadrados, poblados por más de dos millones y medio de habitantes, de los cuales casi un millón pertenecen a la tribu de los jullah y medio millón a la de los malinké; unos y otros son razas de hombres vigorosos, ocupados principalmente en el cultivo de la tierra, de cuya feracidad obtienen arroz, bananas, dátiles, café, naranjas y mijo.

Las condiciones de vida, primitivas hace apenas un cuarto de siglo, se han elevado durante la administración europea. Varios centros de enseñanza y estaciones experimentales de agricultura, así como un colegio técnico y centros vocacionales, que funcionan en Conakry, la capital de Guinea, ciudad de 50.000 habitantes, y en otros centros urbanos de importancia, como Kankan y Kindia, han formado ya una generación de jóvenes guineos capacitados para conducir el desenvolvimiento económico y técnico de la nueva república.

La minería, salvo en lo que respecta a la extracción de diamantes, está en sus comienzos.

La ganadería es una actividad casi doméstica, en el sentido de no existir grandes rebaños; animales ovinos, caprinos, porcinos y equinos se crían en las pequeñas fincas rurales.