El catálogo de los pueblos del Commonwealth Británico encierra nombres del mundo entero


La Comunidad Británica de Naciones incluye las colonias británicas y sus dependencias; la palabra "colonia" es abreviación de su designación oficial: "Colonia sin gobierno propio responsable". El Imperio Colonial Británico incluye, junto a las colonias propiamente dichas, cierto número de protectorados y territorios bajo administración fiduciaria, concedida por otros Estados o por las Naciones Unidas, y condominios, que comparte Gran Bretaña con otras potencias.

Entre las colonias y protectorados cuéntanse los de África meridional; Basutoland, Bechuanaland y Swaziland; Kenya, Uganda, Islas Mauricio e Islas Seychelles en el África oriental, y, finalmente, Gambia y Costa de Oro en la región occidental del continente. También debe incluirse, entre las posesiones africanas la isla de Santa Elena, donde murió, desterrado, el emperador Napoleón.

En el ámbito europeo las posesiones británicas se reducen a Gibraltar, y a las islas de Malta y Gozo, cuya importancia estratégica ha disminuido un tanto en los últimos años por la evolución de la técnica bélica.

El grupo de las posesiones americanas lo integran las islas Bahamas, Barbados, Jamaica, Turks, Caicos, Caymán, las Leeward, Trinidad, Tobago y las Windward; la mayoría de ellas ha constituido la Federación de las Indias Occidentales. En territorio continental sudamericano se encuentra la Guayana Británica, y Honduras Británica en Centroamérica. Las Islas Malvinas, al NE de la Tierra del Fuego, fueron ocupadas por los británicos, que las llaman Falkland, en 1833, pero su soberanía es constantemente reclamada por la Argentina.

En Asia, el pabellón británico ondea sobre Aden, la Unión de las Islas Tokelau, islas Fidji, Gilbert, Ellice, Christmas, Tonga, Salomón (británicas), de los Cocos; y en la de Borneo, sobre el Borneo Septentrional y Sarawak. La Federación de los Estados Malayos, Singapur y Hong Kong completan el mosaico de territorios sometidos al dominio británico en el Extremo Oriente.

Australia y Nueva Zelanda, a su vez, ejercen su autoridad administrativa sobre numerosas islas que se hallan en sus respectivos círculos de influencia; respecto de Australia, ello incluye también el sector antártico correspondiente.

En condominio con otras potencias, Gran Bretaña ejerce su soberanía sobre las islas Nuevas Hébridas, que comparte con Francia, y las de Cantón y Enderbury, con Estados Unidos.

En total, la Comunidad Británica de Naciones cubre una superficie equivalente a la de un cuarto de la de las tierras del globo: unos 31 millones de kilómetros cuadrados.

Su población, según los últimos censos oficiales, asciende a más de 640 millones de personas, equivalente a la cuarta parte de la población total del mundo, y distribuida desigualmente en más de cincuenta países situados en todas las latitudes, de modo tal, que recorrerlos equivaldría a un paseo alrededor del mundo. Si lo realizáramos, nos veríamos obligados a utilizar todos los medios de transporte conocidos, desde aquellos primitivos, hasta los más modernos, terrestres, aéreos y marítimos, pues atravesaríamos ríos y cadenas de montañas, océanos y desiertos, y hasta junglas casi impenetrables donde la Naturaleza reina soberana.

La Comunidad Británica de Naciones está presente en todos los climas; en el helado Norte y en las abrasadas regiones de la zona tórrida; en los países del reno y de la morsa, y en los del elefante y el tigre; en regiones de clima malsano para el europeo, y en aquellas benignas donde puede levantar su hogar y criar hijos sanos y vigorosos; en países enteramente civilizados, y en otros cuya evolución no ha sobrepasado la de la era del troglodita. Tal la inmensa variedad que se ofrece en la prodigiosa extensión del Commonwealth Británico.