La pequeña región encefálica que es el centro de nuestra vida


La totalidad de este maravilloso proceso es gobernada por una pequeña región del encéfalo, que ha recibido el nombre de centro respiratorio, inmediata a los centros que rigen el funcionamiento del corazón y de los grandes vasos. Cuando se descubrió este centro, recibió el nombre de punto vital, porque es realmente, en cierto modo, el centro de nuestra vida; si alguna causa de destrucción llega hasta allí, instantáneamente perecemos. Ciertos venenos, como los principios del opio, actúan sobre este centro; dosis excesivas de opio o alcohol matan de esta manera, paralizando la respiración. En la actualidad conocemos el funcionamiento de este maravilloso centro y cómo puede modificar la respiración. Las células nerviosas que lo constituyen son muy sensibles a la calidad de sangre que reciben y, de un modo especial, a la cantidad de anhídrido carbónico que la referida sangre contiene; nada las excita en tal alto grado. En cuanto han recibido una excitación semejante, mandan acto seguido vivas incitaciones o, como si dijéramos, apremiantes órdenes a los músculos respiratorios, para que verifiquen profundas inspiraciones, a fin de eliminar el exceso de gas.

Ahora bien, puesto que estas células nerviosas actúan según la cantidad de anhídrido carbónico que la sangre contiene, existe un medio para tenerlas en reposo por algún tiempo, y este medio es conocido por cuantos se han zambullido largo tiempo en el agua. En muchos puntos los muchachos se adiestran sacando monedas que les han arrojado al fondo del agua; pues bien, el procedimiento para permanecer algún tiempo en inmersión, consiste en hacer una serie de profundas y rápidas inspiraciones, inmediatamente antes de zambullirse; de esta manera nos desembarazamos de gran cantidad del anhídrido carbónico que la sangre contiene, y entonces resulta posible permanecer sumergido en el agua hasta que una nueva cantidad del referido gas ha pasado otra vez a la sangre, procedente de los tejidos, y entonces el centro respiratorio sufre una nueva excitación y necesitamos volver a respirar.