El parentezco que existe entre las distintas notas de la escala


Es muy fácil expresar exactamente la relación que guardan entre sí las notas de la escala ordinaria en cío natural, o mayor, que tan bien conocemos. Supongamos por un momento que el do bajo corresponde a 24 vibraciones por segundo, aunque lo mismo iludiera corresponder a 25 ó 250 1/2. Pero 24 es una cifra conveniente, y, si partimos de ella, será fácil calcular exactamente los números de vibraciones que corresponden a las demás notas. Dichos números puestos en su orden, y atendiendo a la relación entre ellos, son los siguientes:

Do re mi fa sol la si do

24 27 30 32 36 40 45 48

Estos números, entre sí, no tienen importancia alguna; pero la tiene, y muy grande, la relación que hay entre ellos. Lo primero que observamos, claro está, es que las dos notas que forman la octava guardan la relación de 24 a 48 o sea, de uno a dos. La siguiente proporción sencilla que puede observarse es la del do al sol ya que el primero corresponde a 24 y el segundo a 36, y están por lo tanto en la razón de 2 a 3. Hay otra, que también mencionaremos, y es la de! do al mi, que corresponden respectivamente a 24 y 30, o sea una relación de 4 a 5. Pues bien, sí tomamos esas cuatro notas que hemos mencionado, o sea, do, mi, sol, do, veremos que, en primer lugar, componen el acorde más común y cuyo sonido nos es muy conocido, pues casi todas las piezas terminan con él. Si lo oímos en mitad de una pieza será fácil que nos figuremos que esa pieza ha terminado.