Las tres regiones atmosféricas: la tropósfera, la estratósfera y la ionósfera


Del total de la masa que compone la atmósfera, la mitad se concentra en una zona inmediatamente próxima a la superficie terrestre, de alrededor de 5 kilómetros de espesor. Para su estudio, los científicos han dividido la atmósfera en tres regiones principales: la troposfera, la estratosfera y la ionosfera. En la primera de ellas se aloja la mayor parte de las nubes, se producen todas las tormentas y los climas que conocemos. La región que la sigue, la estratosfera, llamada también intermedia, es el campo de ensayo predilecto de los aviones supersónicos de nuestros días. Viene, finalmente, la ionosfera, que fue explorada por cohetes enviados a alturas de centenares de kilómetros, y que es donde el aire se ioniza constantemente por la irradiación solar. Este fenómeno consiste, como sabemos, en la pérdida, por parte de los átomos, de uno de sus electrones, para transformarse así en iones, o átomos ionizados. En el caso de la ionosfera, los rayos ultravioletas expulsan de los átomos un electrón, que queda en libertad y es susceptible de ser capturado por otro átomo cualquiera, en determinado instante. Este proceso, repetido innumerables veces en el ámbito de la citada capa de aire, aumenta al máximo al mediodía y decrece en las horas de la noche.