De qué modo el aire penetra en nuestros pulmones por virtud de la presión y nos permite vivir


La presión del fluido aéreo deja sentir sus efectos en todos los ámbitos de ese inmenso océano, y su consecuencia más importante es quizá la de permitirnos respirar. Lo que ocurre cuando se respira es que efectuamos un movimiento que tiende a ensanchar los pulmones, pero como éstos se hallan en comunicación con el aire exterior, la presión atmosférica hace penetrar este aire en el espacio vacío que ha quedado en dichos pulmones. De manera que sin la presión atmosférica sería imposible la respiración y, por consiguiente, la vida.

Hasta mediados del siglo xvii los hombres atribuían esa natura! inclinación del aire, o de otro fluido cualquiera, a llenar todo espacio vacío, al hecho de que la Naturaleza tiene horror al vacío, expresión que consideraban suficiente para explicar dicha clase de fenómenos. Pero en 1644 se descubrió la razón por la cual la Naturaleza tiene ese “horror al vacío”. Se vio que lo que ocurre es siempre consecuencia de la presión de los fluidos. Este descubrimiento no se debe directamente al propio Galileo, sino a otro italiano llamado Evangelista Torricelli, que fue el discípulo más famoso que aquél tuvo.

Todos sabemos que es posible elevar agua por medio de la presión atmosférica; pero hay cierta altura de la cual no la podemos hacer pasar: tal altura es de 10,295 metros.