Púrpura de reyes


Una leyenda fenicia dice que Hércules descubrió el color carmesí cerca de Tiro, al ver manchada de rojo la boca de su perro que había mordido un marisco llamado púrpura. La verdad es que los fenicios fueron los primeros que tiñeron sus telas con el carmesí obtenido de los mariscos. El procedimiento era costosísimo y sólo los ricos podían comprar las telas así preparadas. Los emperadores romanos usaron togas rojas y ese color fue símbolo de autoridad suprema. Por confusión, la púrpura vino a designar más tarde un tinte violáceo, pero simbólicamente siguió siendo el rojo oscuro. El “púrpura real” fue el color usado para la coronación de los reyes y se transformó en distintivo de la familia real. “Nacer a la púrpura” viene a significar nacer de una familia imperial o de una casa reinante.


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