La fauna nativa compite con las especies florales en colorido


La fauna mexicana es muy variada, y en sus bosques abundan animales como el tigre, el leopardo, el jaguar, el puma, el coyote, el oso, el mono y la tortuga que habitan en las montañas o en los bosques de tierra caliente; aves de bello plumaje como el quetzal y el guacamayo: canoras como el clarín, el jilguero y el zenzontle (sinsonte); animales ponzoñosos como el alacrán, el escorpión y la tarántula; gran variedad de reptiles de los que los hay venenosos e inofensivos, encontrándose entre los primeros la serpiente coralillo y la de cascabel; entre los saurios abunda el lagarto, el caimán y la iguana, que llega a medir hasta dos metros de largo. Las aves de presa están representadas por el águila, el gavilán, el zopilote y el búho.

En las aguas del Golfo se encuentra el pez espada, la mantarraya, el guachinango, el róbalo, el pámpano, la macarela y el tiburón; en el Pacífico, el arenque, el abulón y el atún; la sardina en las costas de Baja California, y en las de Sonora el camarón, la tortuga y el pulpo. En Acapulco se obtiene la ostra perlera, y la tortuga de carey en Campeche y Yucatán. La pesca es muy buena en los lagos del interior como en el de Pátcuaro, donde abunda el pescado blanco. En Chápala y Cuitzeo se obtiene el charal, el bagre, la trucha y la carpa.

Debido a la conformación del terreno y a la diversidad del clima, la flora mexicana es rica y variada. Se produce una inmensa variedad de frutos de climas cálido, templado y frío, como coco, cacao, vainilla, nuez, pimienta, clavo y otras especias y toda clase de frutas, entre ellas el plátano, principal producto de exportación, traído del Asia por los colonizadores. También se dan en cantidades considerables naranja, limón, manzana, papaya, pera, zapote, pina, mamey, melón, sandía, etc. Durante todo el año crecen silvestres innumerable variedad de flores multicolores, desde la margarita hasta la exuberante orquídea. La riqueza forestal comprende más de 300 especies de las que se extrae carbón, chicle, hule y añil, maderas finas y de construcción, aunque sólo es una pequeña parte la que se explota, quedando una enorme riqueza inexplotada. Abunda el roble, el olmo, el encino, el ébano, la caoba, el chopo, el sauce, el fresno, el nogal; infinidad de plantas tintóreas y medicinales, y gran variedad de árboles productores de aceite. En las regiones costeras se explota ampliamente la palmera, de la que se obtiene la copra o carne de la nuez, de la cual se extrae el aceite de coco.