El gobierno de Cortés, primera administración gubernamental hispánica en México


El primer gobernante español de México fue Hernán Cortés, quien estuvo al frente de la Colonia con categoría de Capitán General y Justicia Mayor, hasta que partió a las Hibueras en el año de 1524. Su administración fue breve pero benéfica, pues dio gran expansión a la Nueva España con las conquistas realizadas bajo su mandato; impulsó la agricultura, la ganadería y la industria, importando de Europa plantas, semillas y animales, estableciendo centros mineros y constructores de cañones y barcos, además de cimentar la religión, porque debido a sus gestiones ante Carlos V, empezaron a llegar frailes que realizaron una admirable labor entre los indígenas. Entre estos misioneros, cuya benéfica obra se inició en 1524, y que dedicaron su vida a proteger y a enseñar a los indios, se distinguieron fray Pedro de Gante, quien fundó en Texcoco la primera escuela que hubo en México y en América; fray Toribio de Benavente, conocido por los indios como Motolinia (que en lengua náhuatl significa pobreza); fray Bartolomé de las Casas, llamado Padre de los Indios, y fray Juan de Zumárraga, fundador de la escuela superior para los indígenas.

Al marchar Cortés a las Hibueras, los tenientes que quedaron en su lugar se dedicaron a intrigar contra él y a sostener rencillas entre sí, por lo que pronto cundió la anarquía.

Al regresar Cortés en 1526, encontró la ciudad sublevada y su nombre y reputación muy comprometidos, por lo que tuvo que marchar a España a defenderse ante el rey. No consiguió que el monarca le devolviera la gobernación de la colonia, pero obtuvo la Capitanía General y el título de Marqués del Valle de Oaxaca. En 1540 volvió a España, donde murió siete años después. Sus restos fueron trasladados a México en 1562.