Los gusanos que se fabrican tubos para vivir


Cumplen un trabajo contrario a los anteriores los gusanos tubícolas, entre los cuales se encuentran las hermelas o sábelas, de 15 centímetros de largo, con un hermoso penacho branquial de fuerte colorido, que se fabrican los tubos donde habitan, pegando unos a otros granos de arena por medio de una sustancia aglutinante segregada por sus cuerpos. Como viven agrupadas en colonias y sueldan sus tubos unos a otros, forman en algunas costas verdaderas murallas, cuyo aspecto recuerda el de los panales de cera de las abejas y que si, por lo común, son útiles o al menos inofensivos, a veces pueden constituir un serio peligro para el hombre. En la bahía de Canéale, Francia, donde existe uno de los mejores criaderos de ostras del mundo, los bancos de hermelas, creciendo constantemente, están invadiendo y desalojando los bancos de ostras.

Otros tubícolas producen tubos calcáreos que obran a modo de soldaduras para los pedazos de rocas entre las cuales viven.

En las islas del Pacífico, habita un curioso gusano llamado palolo que se encuentra en los arrecifes de coral y en las rocas de la costa. En la época de reproducción estos animales nadan, en grandes cantidades, en la superficie del mar, oportunidad que aprovechan los habitantes de Samoa y otras islas para recogerlos, pues constituyen, para estos pueblos, un delicadísimo y muy apreciado manjar.