¿Qué fuerza es la que mantiene a una piedra en el aire antes de caer, cuando la arrojamos al espacio?


Más lógico sería preguntar: ¿Por qué caen las piedras cuando las arrojamos al aire? La observación de lo que ocurre cuando tiramos al aire una piedra, y la consideración de la primera de las leyes del movimiento de los cuerpos descubiertas por Newton, según la cual todo cuerpo en movimiento seguirá moviéndose en la misma dirección y con igual velocidad eternamente, si alguna fuerza exterior no lo impide, nos explicarán este fenómeno. Cuando arrojamos al aire una piedra, le comunicamos una fuerza o movimiento, y la ley de Newton -ley que rige a todas las fuerzas- nos explica por qué se sostiene la piedra en el aire, y nos induce a creer que seguirá el movimiento emprendido hasta que alcance a abandonar por completo la Tierra.

Dos causas, sin embargo, una mucho más poderosa que la otra, la hacen volver al suelo. Una es la resistencia del aire que la piedra empuja por delante de sí en su ascenso, y al cual cede de este modo una parte no pequeña de la fuerza ascensional que posee. La otra es la gravedad de la Tierra, con la cual tiene que luchar la fuerza que anima la piedra hasta agotarse. Entonces regresa a la Tierra; pero la energía de que se hallaba dotada no ha desaparecido por completo, como podemos comprobar prácticamente si tenemos la desgracia de que nos caiga sobre la cabeza.