¿De qué se componen las frutas?


Nadie ignora que, cuando se siembran debidamente las semillas, liberan a la planta que contienen latente; y que de un diminuto germen podemos obtener un árbol muy corpulento. Si es, por ejemplo, un manzano, producirá centenares de manzanas, año tras año. Pero aquí cabe preguntar: ¿de dónde salen todas estas manzanas? Pongamos otro ejemplo: si se siembran las semillas de tomate contenidas en el peso de un kilo, se obtendrá, seguramente, un centenar de veces la mencionada cantidad de ese fruto. ¿De dónde proviene tal diferencia? Parece, a primera vista, que la cantidad centuplicada de tomates ha de ser el efecto de una nueva creación en el mundo, ¿no es verdad?, ni más ni menos que las nuevas manzanas; pero hemos dicho que el mundo que habitamos no varía de peso en lo más mínimo, de manera que esto no puede ser cierto. Nos consta también que la materia, que merced a la fuerza vegetativa pasa a formar las frutas, no se hace de nada, sino que proviene de algo.

Así, pues, la admirable fuerza vital del vegetal ha formado las frutas de las sustancias que lo nutren. En cuanto a los tomates, podemos estar seguros de que, si hubiésemos pesado los elementos de que se nutrió el primer kilo, habríamos obtenido un equivalente del peso de los frutos resultantes. Los vivientes -y éste es un principio aplicable también a los seres humanos durante su crecimiento y desarrollo- toman del mundo que los rodea todo lo que necesitan sus respectivos cuerpos. El planeta que habitamos, considerado en conjunto, no aumenta de peso. Por lo que al árbol respecta, han entrado indudablemente a constituir su tronco, follaje y fruto algunas de las sustancias que se encuentran en el aire, tales como el oxígeno y el carbono del anhídrido carbónico de que se alimenta la planta; y lo propio ha sucedido con algunas de las materias contenidas en él seno de la tierra, como el agua, y muchas sales que se hallan disueltas en ésta; pero esto no pasa de ser una mera transformación: el peso total del globo no varía en lo más mínimo.