¿Por qué suenan a hueco nuestras voces en un salón vacío?


Fácil es adivinar la verdadera respuesta, si empezamos por preguntarnos a nosotros mismos por qué usamos la palabra "hueco" para expresar el sonido de nuestra voz en este caso. En realidad, se trata aquí del sonido que se produce en cualquier espacio hueco, o más o menos redondo y, por un absurdo capricho del lenguaje, llamamos sonido hueco al que se produce en tal espacio.

Ahora ocurre preguntar qué es lo que comunica al sonido este carácter. En realidad, no es otra cosa que la reflexión que sufre en las paredes del espacio donde se origina, siendo esta resonancia lo que le comunica su cualidad característica.
Este mismo fenómeno es el que determina la diferencia que existe entre el sonido de nuestra voz al aire libre y en un salón vacío. La razón de que los muebles, las cortinas y las personas contribuyan a amortiguar los sonidos en una habitación, es que estas cosas presentan superficies muy irregulares, que rompen las ondas sonoras, y no las reflejan con la misma intensidad; o también que están formadas de materias blandas, no elásticas, y por eso absorben el sonido y lo amortiguan.