¿Por qué temblamos cuando sentimos mucho frío?


Cuando el frío que sufrimos es excesivo, el temblor es el medio eficaz que posee el organismo para luchar contra el enfriamiento y mantener normal la temperatura. Sabemos que el hombre tiene una temperatura corporal constante, cualquiera sea la temperatura ambiente, razón por la cual se lo designa homeotermo. Este calor proviene de la combustión de los alimentos por el oxígeno, exactamente lo mismo que una vela cuando arde, y esta combustión se realiza en la intimidad de todas las células del cuerpo. Los músculos que constituyen la masa más importante de nuestro cuerpo contribuyen, más que ningún otro tejido, a mantener este sistema; tenemos una prueba de ello en el hecho de que cuando hacemos ejercicio aumenta la cantidad de calor desprendido. Pero, para que la temperatura corporal se mantenga constante, es necesario que sea regulada la intensidad de la combustión en todo el organismo, y esto se logra por el sistema nervioso central, que la fiscaliza continuamente.

Ahora es fácil comprender que cuando el organismo es sometido a una temperatura exterior muy baja, el sistema nervioso active la combustión para luchar contra aquélla, y produzca temblores musculares que hacen subir la temperatura por aumento de combustión.