EL BÚCARO ROTO - Sully Prudhomme


Tanto por el pensamiento como por la imagen en que esta expresado, la siguiente poesía de Sully Prudhomme es de lo más delicado y exquisito que ha producido la lírica moderna.

El búcaro en que muere esa flor pura,
Un golpe de abanico lo quebró;
Y tan ligera fue la rozadura.
Que ni el más leve ruido se advirtió.

Pero la breve, imperceptible grieta,
Con marcha lenta y precisión fatal,
Prosiguiendo tenaz su obra secreta
Rodeó todo el circuito del cristal.

El agua fue cayendo gota a gota,
Y la espléndida flor marchita veis;
Aunque nadie lo sabe ni lo nota.
Roto el búcaro está: ¡no lo toquéis!

Así, a veces, la mano más querida
Nos roza sutilmente el corazón,
lenta se abre su secreta herida,
se mustia la flor de su ilusión.

Todos lo juzgan sano, entero, fuerte;
Mas la oculta lesión creciendo va;
Nadie su mal desconocido advierte;
Pero no lo toquéis: ¡roto está ya!