EL BUEN HUMOR INFANTIL - Amelia de Wailly


Esta linda composición, llena de agudeza y gracia femenina, es de Amelia de Wailly. poetisa francesa (1857-1926), esposa de Gustavo Mesureur, y autora de una preciosa colección de poemitas. “Nuestros niños”, plenos de gracia y encanto.

Lloviznaba. Marchábamos de prisa.
Estaba el cielo lóbrego; sañudo
Soplaba el glacial viento.
Llenaba el robledal niebla indecisa:
Conmovía el ramaje, ya desnudo,
Vago estremecimiento.

Afrontando gozoso la tormenta,
Bajando el rostro, apresurando el paso,
Bebé feliz cantaba;
Un pájaro, con voz clara y atenta,
Como si allí estuviera para el caso,
Cortés le contestaba.

Resbalando y hundiéndose en el lodo,
Hacia mí, con sonrisa deliciosa,
Volvió la cabecita.
Aunque el invierno cruel lo arrase todo,
Bebé en el corazón guarda una rosa
Que nunca se marchita.


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