Los objetos que llenan los escaparates de las tiendas de París


Para la fabricación del hilo en estas regiones se emplea el lino producido en los campos del Norte. La mayor parte de los tejidos de hilo y algodón, tan usados en Francia, son elaborados en estas fábricas. Además de la lana de los rebaños de los Ardennes y de los prados franceses, llega por Inglaterra lana de Sudamérica, Australia y Nueva Zelanda, para proporcionar primera materia a las fábricas del norte y del este de Francia, país que figura también entre las primeras naciones que se dedicaron a la producción de seda artificial.

De las rocas de granito del Macizo Central se extrae el caolín, con el que se fabrica la porcelana más fina, si bien algunas veces resulta más conveniente introducir por el Sena los granitos de Cornualles y de Noruega. En Sévres, cerca de París, y en Limoges, cerca de Auvernia, se produce la porcelana más hermosa. Los franceses son especialmente hábiles en el esmalte de superficies lúcidas, y hacen, además, hermosos trabajos de cacharrería campesina, que es, naturalmente, más barata que la porcelana fina.