El gran río Loria y el Sena que arrastra sus aguas hacia París


El Ródano forma un delta pantanoso al desembocar en el Mediterráneo, originando a su salida bancos de arena. Marsella, que es el puerto más importante de Francia, se encuentra al este de dicho delta, en el tormentoso golfo de León.

El otro gran río del Sur es el Garona, el cual tiene su origen en los Pirineos y recibe en su orilla derecha numerosos afluentes que provienen de las montañas de Auvemia, en la gran meseta central. Sus aguas entran en el Atlántico a través de una larga y ancha desembocadura llamada el Gironda, al sur de Burdeos.

El Loira, que es el más largo de los ríos franceses, nace en las montañas centrales, forma en su curso un gran semicírculo, recibe numerosos afluentes y desemboca también en el Atlántico. Tanto el Loira como el Garona están expuestos a frecuentes desbordamientos, por lo cual se han construido a lo largo de sus orillas numerosos diques con objeto de impedir que las aguas inunden los campos. Si el desbordamiento es muy impetuoso, constituye una gran calamidad, pues los campos se inundan por completo y los habitantes de los pueblos y ciudades anegados tienen que salvarse en botes; muchas casas quedan destruidas.

El suave y tortuoso Sena brota de las montañas que se encuentran a la orilla derecha del Saona, recibe al Mame en París y se encamina por Ruán a El Havre, ciudad situada en el canal de la Mancha y que es el principal puerto del norte de Francia. Transporta este río más mercancías que ningún otro del país.