Navegación de un valiente francés por el Misisipi


Otro explorador francés digno de mención es Roberto Cavelier, llamado La Salle, uno de los hombres más valientes que han existido. En cuanto se hubo determinado a explorar el Misisipí hasta la desembocadura, pareció que la suerte le volvía las espaldas. Empero, ningún contratiempo llegó a abatir su espíritu. Al verse falto de embarcación para navegar por el río, decidió proseguir la navegación en canoas, que él y sus compañeros trasladaron desde el río Chicago al Illinois. Descendieron por éste hasta el Misisipí y partieron para su largo viaje al golfo de México, en febrero de 1682. La expedición constaba de 23 franceses, 80 indios, 10 mujeres indígenas y 3 niños.

Se hicieron a la vela, pasaron por el punto donde habían retrocedido Marquette y Joliet, y finalmente alcanzaron el golfo de México, el 9 de abril de 1682. La Salle declaró todo aquel país propiedad de Francia, y lo llamó Luisiana en honor del monarca francés, Luis XIV.

Pero no ocultándosele que no podrían conservar el territorio sin que se estableciesen en él, dispuesto a fundar una fuerte colonia en la desembocadura del Misisipí, se embarcó para Francia con el fin de buscar hombres y provisiones.

En 1684 regresó con 280 personas y cuatro naves; mas su piloto no pudo hallar la desembocadura del río que buscaba entre los muchos que desaguan en el golfo y las muchas bahías en la costa, que parecían bocas de ríos. Por fin, tomando tierra en Texas, 400 millas al oeste del río, levantaron el fuerte de San Luis, mientras La Salle continuaba buscando en vano las bocas del Misisipí. Como escasease la alimentación, La Salle, con algunos compañeros, se hizo a la vela hacia Canadá en busca de provisiones. Por desgracia, no todos sus hombres eran buenos, lo cual lo había obligado a castigar a algunos, y éstos determinaron matarlo para vengarse.