El estrecho canal por donde pasa el aliento vital


En la vejez, si bien los cartílagos de la laringe no llegan a ser verdaderos huesos, son más duros y calcáreos que en la juventud, y ésta es seguramente la razón por la cual un oído ejercitado, puede, sin dificultad, distinguir la voz de una persona joven de la de otra entrada en años.

La función esencial de la laringe es sostener y dirigir la acción de dos cuerdecitas llamadas cuerdas vocales o de la voz. Las cuerdas vocales tienen un borde libre en su parte media, desde el cual se extienden hasta las paredes laterales de la laringe.

Todo el aire de la respiración pasa a través del estrecho espacio comprendido entre las cuerdas vocales. El mecanismo por el que éstas se mueven, es muy sencillo. Cada vez que hacemos un movimiento de inspiración, las cuerdas vocales se separan. Mas para que las cuerdas vocales puedan producir la voz, se necesita que sus funciones sean mucho más complejas. Ha de ser posible también sostenerlas tirantes, de manera que vibren cuando el aire las impulse de un modo suficiente. Sin embargo, no es esto todo, sino que deben de ser también capaces de adquirir diferentes grados de tensión. Como veremos cuando estudiemos el sonido, el tono de un objeto cualquiera en vibración, esto es, la cualidad de toda nota de ser más aguda o más grave, depende de diversas circunstancias; del peso del objeto sonoro, de su longitud y de su mayor o menor tensión.