¿Dejamos de ver en cuanto la luz desaparece?


Esta ley se cumple en todas nuestras sensaciones y sentimientos, y también es cierta probablemente en toda clase de materia viviente, y su descubrimiento fue uno de los más importantes del siglo xix. Lo mencionamos aquí, porque puede estudiarse bellamente en el caso de la retina; y todo el mundo reconocerá que es muy interesante ver que lo que ocurre en la retina se cumple también en toda materia viviente. La cuestión del tiempo es muy importante en la acción de la retina. ¿Vemos directamente la luz que hasta nosotros llega? ¿Dejamos de ver en cuanto la luz cesa? No, hemos de responder a ambas preguntas, como ocurre en todos los casos de sensación.

La luz necesita obrar algún tiempo antes de que veamos. Durante este tiempo no cabe duda de que la luz descompone las sustancias químicas que para este objeto están acumuladas en las células visuales, y los cambios que su descomposición produce son los que excitan las fibras del nervio óptico y envían al cerebro el correspondiente mensaje.