La aventura de Uncama


Era éste un atrevido cazador, y como aconteciese que cada noche se introducía en su jardín un animal extraño, que le destruía las raíces de las plantas, lo acechó para seguirle. El raro animal, al verse perseguido,

que lo había conducido hasta allí. Así regresó a su propio país, pero cuando llegó a la aldea, las gentes del lugar no lo reconocieron.

-¿Dónde está la mujer de Uncama? -preguntó-. Tengo un mensaje para ella.

-¿Uncama? ¿Uncama? -exclamó la gente-. ¿Era aquel hombre que desapareció, muchos años ha? Su mujer es ahora una vieja.

Así era, efectivamente; durante algún tiempo ella no reconoció al cazador. Éste era ahora más joven que su propio hijo, que había dejado en brazos de su madre, cuando siguió al animal por el agujero que le condujo al país subterráneo.