En su afán de belleza, el hombre primitivo voló en alas del arte


La palabra arte tiene varios significados y, por tanto, puede ser empleada de distintas maneras. En su alcance más amplio significa disposición e industria para hacer algo; en ese sentido se vincula al viejo concepto de artesanía y artesano, es decir, el que ejerce un oficio meramente mecánico. Cuando el hombre dio rienda suelta a su imaginación y empezó a embellecer lo que lo rodeaba tratando de imitar la Naturaleza o de idealizarla, el concepto de la palabra arte fue elevándose a través del tiempo hasta lograr la jerarquía que hoy tiene.

Las artes se han dividido en artes mayores y artes menores, pero tal división no debe llevarnos a forjar un concepto erróneo, pues estas últimas son tan dignas como aquéllas. Las artes menores son artes aplicadas al embellecimiento de objetos destinados a fines prácticos; las artes mayores, en cambio, tienen un fin estético o puramente ornamental.

Las artes mayores se dividen en artes espaciales o plásticas -arquitectura, pintura y escultura- y artes temporales o recreativas -poesía, música y danza-; a ellas se agregó luego el cine, como séptimo arte.

Entre las artes menores figuran la cerámica, la orfebrería, la ebanistería, vitrales de colores, libros iluminados, tapices, encajes, trabajos realizados en hierro forjado y otras más.