Las diversas regiones del extenso territorio argentino


Su extenso territorio puede ser dividido en cinco regiones, de las cuales cuatro corresponden a tierra firme y la quinta abarca el conjunto de islas y el sector antártico.

País de llanuras y mesetas, se ha tenido en cuenta para tal división un punto de vista económico, aunque todas las regiones son de producción mixta, ya que en cada una pueden darse tanto los cultivos y crías propios de las zonas subtropicales como los de las frías.

Estas regiones son: la zona subtropical o del Norte, que comprende las provincias de Jujuy, Salta, Catamarca, Tucumán, Santiago del Estero, Chaco, Corrientes, Misiones y Formosa. En ella se producen el tabaco, la caña de azúcar, el algodón, la yerba mate, el arroz, el trigo, el maíz, la alfalfa, toda clase de frutales y numerosos cultivos menores; la ganadería está representada por el ganado vacuno, lanar, caballar, mular, cabrío y porcino. Las industrias azucarera, yerbatera, algodonera y arrocera en esta zona se acrecientan notablemente año tras año. En la segunda región, que corresponde al centro del país, es donde se dan más abundantemente los cereales y donde la riqueza ganadera alcanza su mayor desarrollo. Es y ha sido considerada siempre como uno de los graneros más importantes del mundo. Geográficamente, comprende lo que conocemos con el nombre genérico de “pampa” y “litoral”; abarca las provincias de Buenos Aires, La Pampa, Córdoba, Santa Fe, y Entre Ríos.

Al Oeste se encuentra la zona vitivinícola por excelencia del país. Sus principales producciones son la vid, el olivo y los frutales, pero en ella se dan también cereales y algunos productos subtropicales; la integran las provincias de Mendoza, San Juan, San Luis, La Rioja y Neuquén.

La región patagónica es esencialmente ganadera, y los lanares son su principal fuente de riqueza. En ella se encuentran también, en pequeña escala, cultivos de todo género; las industrias pesquera y petrolera constituyen otros recursos de la zona, que día a día van incrementándose.

La fuente de riqueza más importante de la quinta región, que abarca las islas del Sur y el sector antártico, está representada por la industria pesquera exclusivamente.