¿Por qué el estruendo de una explosión puede romper los vidrios de las ventanas?


No es difícil responder a esta pregunta sabiendo lo que es un ruido. Es una onda irregular que navega por el aire: una cosa real que tiene peso y fuerza. Una onda de aire puede romper los vidrios de una ventana, de la misma manera que una ola del mar destroza un rompeolas, aunque, como indica su nombre, éste debe romper a aquélla, y lo hace en realidad, si la ola no es demasiado pujante.

Si nos detenemos a reflexionar un minuto, veremos que cada vez que un ruido penetra por una ventana cerrada la sacude, y ella agita, a su vez, el aire confinado del interior del cuarto, transmitiéndole su movimiento vibratorio, aunque no con tanta fuerza; finalmente, las ondas sonoras llegan a nuestro oído haciéndose oír los sonidos tal cual se han producido fuera, aunque con menor intensidad. Ahora bien; bastará que el ruido sea suficientemente intenso, o lo que es igual, las ondas aéreas lo bastante violentas, para que la sacudida que imprimen a los vidrios de la ventana supere a la resistencia de los mismos y, entonces, evidentemente sobrevendrá su rotura. Ya queda dicho que el aire es una cosa real, que posee peso y fuerza; por tanto, preguntar por qué rompe el ruido los vidrios de las ventanas equivale a inquirir por qué los rompe una piedra.