¿Por qué pestañeamos?


El verdadero objeto del pestañeo es mantener constantemente limpio el globo del ojo. El movimiento de las pestañas se efectúa merced a ciertos músculos que tenemos en los párpados, y la limpieza de los ojos se hace por medio de las lágrimas. Este es en realidad el verdadera objeto de las lágrimas, las cuales son segregadas por una glándula pequeña y pasan a los ojos por un canal o conducto; y cuando al pestañear se mueven los párpados de arriba a abajo, esparcen sobre el cristal del ojo este fluido acuoso, que lava las partículas de polvo o de cualquiera sustancia que haya en él. Algunos animales, las serpientes, por ejemplo, carecen de párpados, y por eso jamás pestañean. Los ojos de estos seres se hallan recubiertos por una membrana dura, o escama, que los protege contra la suciedad y todo daño exterior.