¿Cómo crecen y se desarrollan las flores?


Todos los seres vivientes crecen en cierto período de su existencia. Si se trata de organismos unicelulares, es fácil darse cuenta del crecimiento mediante sucesivas mediciones con el microscopio; pero si son plantas evolucionadas, hay que emplear dispositivos especiales. En el crecimiento intervienen factores internos y externos. Para que las flores desarrollen algunos de sus importantes elementos internos se necesitan otros externos, como la luz, agua, oxígeno y temperatura. Colocada en estas condiciones, la planta absorberá los elementos que necesita para desarrollarse y la energía empleada en ello. Aparte esto, nada podemos decir. Lo único que sabemos es que en la vida del rosal existe una fuerza directora que hace que las flores que eche sean rosas, y no lilas o alhelíes; todavía no podemos, por medio de fuerzas exteriores, hacer que una rosa sea producida por otra planta que el rosal. Las células que contienen la vida de los rosales poseen esta propiedad.

Esta misma cualidad es común a todos los animales y plantas. Cada uno tiene su estructura especial, y se desarrolla siempre en una forma más o menos determinada. Aunque ofrezcamos el mismo alimento al rosal, a la lila y al clavel, cada una de estas plantas echará sus flores peculiares; y aunque demos la misma leche a la perra y a su perrito, y a la gata y a su gatito, cada uno seguirá desarrollándose con arreglo a lo que es.