¿Cómo es que las nubes retienen la luz del sol si son agua pura?


El agua en todos sus estados detiene y toma cierta cantidad de la luz solar. Bien sabemos que aquélla en el estado líquido lo hace, porque se vuelve pronto más oscura a medida que nos sumergimos más y más en ella, y en el estado sólido, o hielo, también. El agua en el estado gaseoso lo hace menos; y en tal estado, en el que está siempre presente como formando parte del aire, no detiene bastante luz solar para que nosotros lo advirtamos. Pero el agua en forma de gotas redondas suspendidas en el aire, que es de lo que realmente están hechas las nubes, puede detener gran cantidad de luz solar.

Pronto podremos comprender esto, si recordamos a qué se parece una burbuja de jabón. Imaginémonos una, hecha casi toda de agua; tiene una superficie hermosa y brillante. Esto significa que la luz que cae en ella es rechazada de su superficie en gran cantidad. Así pues, si hay una nube hecha de millones de diminutas burbujas o gotas, que también son cosas que brillan, rechazará gran cantidad de la luz que cae sobre ella. Esto podemos comprenderlo, cuando vemos el lado iluminado de una nube. No hay nada que pueda ser más brillante y perfectamente blanco que las nubes; si las miramos, nos parecen montañas de nieve. Son blancas y brillantes, precisamente porque no dejan que la luz solar pase a través de ellas, sino que la reflejan o la rechazan.