LAS TRES PALABRAS DE FE - Federico Schiller


Apenas en el mundo penetramos
Tres palabras nos dicta el corazón:
Tres palabras de fe que murmuramos
Sin conocer acaso su intención;
Cualquiera de las tres que el nombre olvida
Amarga los instantes de su vida.

Dios creó libre el alma, y serlo debe
Aunque en la esclavitud fuera engendrada;
No os dejéis engañar por esa plebe
Que afirma o niega, loca o degradada;
Temblad ante el esclavo cuando vibre
La ira en él; pero no ante el hombre libre.

No es nombre vano la virtud: el hombre
Debe rendirla culto en su camino,
Aunque haya riesgo en confesar su nombre,
Pues ella le conduce a lo divino.
La infantil sencillez hace evidente
A veces lo que el sabio no presiente.

Hay un Dios: voluntad inquebrantable,
Más que la voluntad que al hombre ha dado;
Su espíritu se mece en lo insondable
Y crea y purifica lo creado.
Cuando el mundo perezca, inerte y frío,
Dios con su nombre llenará el vacío.

Propagad estas tres palabras bellas
Puesto que conocéis ya su sentido;
Para eso el corazón os habla de ellas
Apenas a la luz habéis nacido.
Quien crea que del hombre el sino rigen,
No degenerará de su alto origen.