EL GANGOSO - Calderón de la Barca


En los comienzos de la Edad Moderna, y en especial durante la segunda mitad del siglo xv y todo el xvi, los piratas moros que infestaban el Mediterráneo hacían cautivos cuantos cristianos podían, y los maltrataban para obligarlos a que compraran su libertad entregando por rescate cierta cantidad de dinero, la cual había de ser tanto mayor cuanto más prendas o habilidades tuvieran los cautivos. Calderón de la Barca cuenta el gracioso incidente que pasó entre un moro y un cautivo, a propósito del rescate.

Cautivo un moro a un gangoso:
Y él, bien o mal, como pudo.
Se fingió en la nave mudo,
Por no hacer dificultoso
Su rescate; de manera
Que cuando el moro le vio
Defectuoso, le dio
Muy barato. Estando fuera
Del bajel, “Moro, decía,
No soy mudo: hablar no ignoro.”
A quien oyéndolo el moro,
De esta suerte respondía:
“Tú fuiste gran mentecato
En fingir aquí el callar:
Porque si te oyera hablar,
Aun te diera más barato.”